Detalle del puerto en este enlace

Hoy, antes de las 8:00, Er Dergao pasa por el lugar de cita y tras intentar ponérsela dura en varias ocasiones se da cuenta que cada vez la tiene mas morcillona por lo que espera a que lleguen P. Pacoshev, J. Bugno y un gualdo para avisar que va a la siguiente gasolinera y que allí esperará a los globeros. Poco a poco van llegando el resto de los globeros, E. Zulle, J.M. Piépoli, M. Vinokourov y S. Olano. A. Cipollini se llega con 'La Espada', con canastilla y dinamo, para avisar que no va por un problema en la rodilla.

Olano piensa que también la trae floja y se dispone a ponérsela dura a lo que el resto de los globeros le grita ¡NOOOOOOO! Pero ya era tarde, la bomba de la gasolinera le había vaciado la rueda. Entonces decide ponérsela dura manualmente y el resto de los globeros le aconseja que deje la rueda tranquila pero él insiste y se carga la válvula. Ante tal tardanza, Er Dergao vuelve atrás y por El Coñuelo los ve aparecer con lo que se da media vuelta y espera, a 18 km./h, ser alcanzado. Es alcanzado pero tienen que realizar un alto en la gasolinera para que Olano cambie la cámara, el gualdo sigue. Sobre las 8:45 reanudan la marcha y Bugno se va, mientras el resto comienza un nuevo calentamiento.

Antes de llegar al desvío a Cajiz, ¡BAM!, Piiiisssssshhhhhhffffffff, Olano pincha, un pellizco se la ablanda de golpe, los globeros paran excepto Bugno que como iba delante no se da cuenta. Zulle le da su cámara a Olano con lo que solo quedaba en el grupo la cámara de repuesto de Pacoshev ya que Bugno, aunque llevaba dos, no está para socorrer y, a este paso, seguro que Olano necesitaba varias más antes de llegar a Torre del Mar. Ya llevo tres párrafos y aun no habían hecho 8 km.

Tras reanudar la marcha, 9:00, por segunda vez, son alcanzados por un grupo de ciclistas "patas pelás", con los que maura Zulle, y tras saludarse Er Dergao, en frío y haciendo la primera globerada del día, se pega a rueda con la intención de chupar hasta la Cuesta de la Caca. La velocidad de crucero era de 30 o 31 km./h, buena velocidad para Er Dergao pero los "patas pelás" miran, lo ven, ¡ARG! ¡Un globero-lapa!, y comienzan a subir ritmo. La Cuesta de la Caca se embiste a 37 km./h pero la velocidad baja hasta 34 cuando se está llegando arriba. Zulle, rodador donde los halla, desde atrás viene robando terreno, Er Dergao desiste al haber conseguido lo que pretendía, Zulle les da alcance mientras el último de los patas pelás implora una bajada de ritmo. Detrás se reúnen Vinokourov, Piépoli, Olano, Pacoshev y Er Dergao que los había esperado para continuar con la extraordinaria.

El gualdo, que se marchó en la primera parada, aunque normalmente se vuelve en Torre del Mar, viendo que no era alcanzado se anima y decide seguir con dirección a Vélez pero antes de llegar se vuelve con una brutal descomposición y tras llegar a Torre del Mar decide ponerle remedio, tras las cañas, desalojando el lastre. ¡Ojo! Pantani, gasta cuidado cuando te escondas.

Al final se reúnen todos, escapados, grupo y descompuesto en la gasolinera de Torre del Mar donde Olano intenta ponérsela mas dura aun. Debido a que sabían que Bugno volvería a largarse solo deciden comprar cámaras en Torre del Mar mientras el resto espera en el abocatamiento de Las Cibeles donde se reponen del "gran esfuerzo" realizado tras 15 km. de llano a 22 km./h. La tienda no abría y se enteran de otra tienda por lo que mientras Zulle, Pacoshev, Vinokourov, Piépoli y Er Dergao prosiguen a no más de 25 km./h Bugno acompaña a Olano a comprar cámaras, siendo dos élites, y con el autobús sin tirar fuerte, seguro que se unirían pronto.

Mientras van para Vélez se realizan relevos ordenados y bien hechos. El otro día hablábamos de hacer relevos cortos y escasos, hoy podemos hablar de reservarse, al dar el relevo, bajando varios kilómetros la velocidad. Siendo extra y con la intención de acompañar al mas lento tampoco había porqué forzar la cosa pero el hecho no pasa desapercibido.

Al llegar al Trapiche el turno de relevos se rompe y algunos comienzan a colaborar mas que otros. La velocidad no era fuerte, cuando más 22 km./h, luego tampoco había que reservar nada. Mucho antes de llegar a Triana son alcanzados por Bugno y Olano que siguen a todo trapo y por lo tanto el resto de los globeros suben ritmo y Er Dergao pasa a ocupar la última posición y a mas de 100 metros de distancia. Se realiza una parada en Benamargosa para coger agua y reanudan la marcha tras mas de 20 inexplicables minutos.

Bugno sale en estampida, seguido por Pacoshev que hoy también traía una maduradora de dos platos y con un 25 como piñón más grande, además le había 'prometido' a Bugno que iría a su rueda subiendo a Riogordo. Tras él sale Vinokourov, Piépoli, Zulle, Olano y Er Dergao descolgado. Las distancias entre ellos se van agrandando mientras se escucha a Er Dergao gritar a lo lejos "Un respeto a mis maures, ¿esto no es una extra?", pero nadie, como es lógico, le oye debido a la distancia.

Estaban comenzando la montaña a la inversa, muy rápido para terminar muy lento, ¡ellos sabrían!. Por otro lado, aquella ¿qué extra era? si cada uno iba a lo que daba a lo "mariquita el último". Además, que la élite ponga dura una salida es explicable pero que sea el propio autobús no es muy comprensible sobre todo si son los que tienen el historal más amplio de maures gordos. Er Dergao, mientras ya los veía a mas de 1 km de distancia, decide unirse al desmadre ¿para qué mosquearse?. Tan solo Piépoli, Zulle y Olano iban comportándose. Ya que la mayoría hacía lo que le parecía, en una guerra sin cuartel, Er Dergao se toma la salida como entreno, Piépoli también, decidiendo ir el último sin pillar ninguna rueda y procurando no maurar y Olano se preocupa de los más retrasados. Poco más adelante Vinokourov alcanza a Pacoshev y le deja atrás. Er Dergao se pone a 140, poco pero suficiente para no maurar en puertos largos.

Las chicharras cantan como nunca, el moreno los aplasta, las cuestas parecen mas duras que la última vez que pasaron por aquí y es lógico ya que el ritmo era mas fuerte que la última vez, algunos comienzan a quejarse de lo largo del puerto, a cada curva, un descenso para volver a subir lo bajado y algo mas. Ya nadie puede mantener el ritmo al que se había comenzado pero los que más acusan el maure son los que más fuerte habían salido, como es lógico, con la excepción de Bugno y Olano. Vinokourov, Olano, Zulle y Er Dergao comienzan a hacer la goma entre ellos y Pacoshev pasa a acompañar a Piépoli que los observaba a todos a distancia.

Y por fin llegan a la última rampa dura que, como no, es la mas dura de todas y no solo por lo maduros que iban sino por la propia rampa. La cima de esta rampa fue descubierta por Faenini, que tras un maure de los gordos la bautizó como Alto "Este olivo es mío" al llegar hasta él, abrazándolo y confesar que si no llega a estar el olivo se cae al suelo del mareo. El muy globero de Er Dergao comienza a subir la rampa escalando. ¡Imbécil! ¡con lo bien que iba! y cuando está llegando a la cima necesita, algo tocado, cambiar a plato chico y éste no entra. Ya no tenía fuerzas para seguir con el desarrollo que llevaba por lo que tiene que bajarse de la burra para cambiar a mano. Zulle venía siendo perseguido por un tractor durante un par de kilómetros y este hecho le había comido la moral pero alcanza a Er Dergao a pocos metros de la cima. Er Dergao, tras reanudar la marcha y faltando poco para coronar, se dedica a hacer eses para paliar en parte el esfuerzo realizado en esta rampa y teniendo en cuenta que ya solo quedaba descenso hasta Riogordo. Olano vuelve a buscar a los rezagados y tras comprobar que el estado no era del todo putrefacto vuelve a dirigirse a Riogordo. Bugno había "sacado", en extra, 7m 24s al resto del grupo que llega mas o menos agrupado pero estirado. Pacoshev alega mareos varios y piernas cargadas, tanto lo uno como lo otro tienen explicación, lo primero sobre esfuerzo en la fase inicial y lo segundo es debido a abusar de desarrollo junto con los bloqueantes pero los bloqueantes son necesarios ya que, en caso contrario, como siempre va a lo que puede, le daría algo.

En Riogordo cogen agua, se refrescan por dentro y continúan camino. La siguiente parada de agrupamiento era en el Restaurante "La Viñuela".

Una vez mas se sale a moco tendido, primero Bugno, tras él Piépoli, a distancia Er Dergao, Zulle, Olano, Pacoshev y Vinokourov. Buen ritmo y pocas contemplaciones con los descolgados predominan en este tramo. Primero se descuelga Vinokourov y más tarde Pacoshev comienza a hacer la goma insistentemente. Al llegar a la Viñuela se vuelve a repostar agua y se refrescan con bebidas isotónicas y, además, Bugno y Zulle se dopan con inhibidores de ácido láctico mientras Pacoshev, mas tradicional, lo hace con ensaladilla rusa. Olano que comienza a oler a podrido de mauro que iba, insiste para que el camarero suelte algo de "alpiste" recuperante. La vuelta era originariamente por Benamocarra pero la maurez de los kamikazes hacen que estos voten por volver por el llano, estaban comenzando a pagarse los abusos de ritmo y se jode un poco la salida pero no era cuestión de dividir el grupo. No es la primera vez que tras un auto-reventón provocado por la poca cabeza de algunos, que no se reservan nada, tienen que cambiarse los planes. La vuelta por Benamocarra hubiera sido algo agónica pero la mayoría había reservado fuerzas para esta subida.

Tranquilamente se realiza el descenso y hay que hacer un nuevo alto al ver que Pacoshev no viene. Piépoli iba detrás, con su entrenamiento, y seguro que se había quedado con él pero aun así y ya que se iba a volver en grupo, debido a que los kamikazes estaban listos, era mejor esperarles. En el desvío a Canillas del Aceituno se realiza el alto y ambos, Piépoli y Pacoshev, aparecen tras unos minutos.

Se vuelve a reanudar la marcha y Piépoli vuelve a retrasarse intencionadamente pero manteniendo distancias. Olano pilla un maure de los gordos y Piépoli lo pone a rueda. Delante Bugno, Zulle, Pacoshev y Er Dergao entran al relevo. A Vinokourov se le ve también maurillo y no consigue contactar con los de delante pero tampoco se resigna a ir con los dos que van tras él. Pacoshev parece repuesto pero en cambio Olano va de mal en peor y Piépoli baja ritmo para no dejarle solo. Desde Velez a Torre del Mar, Bugno, Pacoshev, Zulle y Er Dergao bajan mucho el ritmo al perderlos de vista. Viendo que nadie viene realizan un nuevo alto en la gasolinera de Torre del Mar, pocos minutos después aparece Vinokourov y al rato aparecen Piépoli con Olano. Olano confiesa estar ligeramente espatarrao y es normal tras varias semanas sin tocar la burra.

Tras reponer los bidones de agua continúan camino pero la salida de Bugno hace que, nada mas comenzar, el grupo primero se estire y luego se divida en dos. Er Dergao sale al encuentro de Bugno que va esperando a los demás, le sigue Pacoshev. Detrás va marcando ritmo Olano, aparentemente recuperado, con Zulle, Piépoli y Vinokourov. Delante ya habían conectado Er Dergao y Pacoshev con Bugno y los tres van esperando a que conectaran los cuatro que venían tras ellos. Zulle da un relevo a Olano pero tiene que bajar ritmo tres veces al ver que el grupo no le seguía.

Al ver Zulle que el grupo trasero no conectaría decide llegar hasta el grupo de Bugno para que bajen aun más la velocidad alcanzándolos en la Cuesta de la Caca y ligeramente agotado se pone a rueda de Er Dergao para proponer una bajada de ritmo. Nadie le oyó o no le quisieron oír, cualquiera sabe, ya que al bajar la cuesta siguieron manteniendo ritmo, incluso apretaron, en algún momento, hasta volver a conectar con Bugno que volvía a estar esperando y se siguió marcando un ritmo de unos 28 km./h. y cuando le tocó el relevo a Zulle comenzó a subir ritmo, ya que se encontraba bien y no se podía reprimir, de aquella forma, jamás se unirían los dos grupos pero de todas formas ya quedaban menos de 10 km y nadie iba solo, delante cuatro y detrás tres donde Piépoli sigue con su plan de entrenamiento de no ir con el grupo para no pillar rueda pero a su rueda se sitúan Vinokourov y Olano que si que la necesitan y con urgencia.

Zulle tiene intenciones de automaurarse y el ritmo alcanza velocidades superiores a los 37. A Er Dergao le ponen nervioso las velocidades superiores a 35 km./h y va pensando que va a ser turbo-maurao por lo que indica, a los que van detrás, que le adelanten para que se pongan a rueda de Zulle. Bugno lo hace pero bien por misericordia o por mauración pide a Zulle clemencia ya que Er Dergao y Pacoshev estaban siendo descolgados. Zulle, magnánimo, accede y alega que aun no se ha recuperado de la cuesta de Riogordo ...¡Menos mal! Con un ritmo más tranquilo Er Dergao también se dispone a agotar las reservas de glucógeno y comienza a darse tirones escalando en llano, como buen globero, entre 30 y 40 km./h pero siempre tras Zulle y Bugno. Pacoshev le sigue manteniendo ritmo fijo.

Al llegar al desvío a la autovía los cuatro bajan ritmo para realizar el enfriamiento llegando a la Zona Oficial de Abocatamientos a las 15:00 aproximadamente.

El recorrido 100 km. y la media osciló entre los 23'5 km./h de Bugno y los algo mas de 21 km./h de los mas mauros. Varios litros de refrescos, ensaladas, boquerones en vinagre, patatas fritas, jamón, etc. sirvieron para recuperarse del peso perdido. Olano no esperó la recuperación ya que necesitaba UVI con urgencia y durante horas, Pacoshev sabía que también la tendría UVI aunque solo se conformaba con media hora y seguro que algún otro también la tuvo.

Conclusiones:

Por lo menos en las extras habría que pensar en todos y no solo en uno mismo. El no preocuparse de los rezagados o el ir a tope para después tener que capar el recorrido no es lo que se espera de un globero del 22x28. Pero si es lo que quiere la mayoría ¡Viva el desmadre! Para eso somos globeros.

 


Manuel García Casado