Hoy, a las 8:00, en la gasolinera de la Torre de Benagalbón se encontraban M. Mauri, S. Olano, P. Telecom, J. Rominger y M. Er Dergao. Parecía raro ver tan poco globero pero, como sabemos, últimamente hay varios globeros pensando colgar la burra, pero salir con la bici no implica empacharse de bici como suelen hacer, se puede ir mas despacio. Y el salir a las 8:00 hay otros a los que le da pereza. Se ponen a arreglarle un poco la rueda a Rominger, que la traía realmente mal. Cuando terminan la operación Rominger dice que prefiere meterla blanda y cuando está dentro ponérsela dura. Los globeros se miran unos a otros y S. Olano le ofrece un higo seco pero Rominger dice que ya está harto de higo seco.

Comienzan el calentamiento sobre las 8:12 y realizan un calentamiento real comenzando por unos 15 km./h y terminando a la altura de Cajiz por unos 24 km./h. En algunos momentos se alcanzaron los 27 km./h pero no era la idea por lo que volvían a bajar ritmo.

Al llegar al desvío de Algarrobo solo llevan una media de 22 km./h y al parar en Algarrobo había bajado a 21,75. Toman un cafelito rápido y, ya que confiesan que, ninguno tiene prisa por volver comienzan el ascenso juntos. La velocidad mínima fue de 8 km./h y la máxima de 10 km./h. Rominger comenzó mas lento de lo normal para él y fue subiendo ritmo poco a poco. Cinco minutos después comenzaba a hacer la goma permaneciendo largos ratos con el grupo. El ritmo se mantuvo a lo largo de todo el recorrido hasta llegar a la gasolinera. En este punto, viendo que ya no se reincorporaría Rominger, decidieron subir la velocidad y, como faltaba poco, no importaría si alguien mas quedaba atrás. La velocidad media en la gasolinera era, desde el Rincón, de 17 km./h y al llegar al Alto del Pantani se terminó con 16,75 km./h sobre las 10:40. Los allí presentes se tomaron un segundo cafelito, allá en la montaña, para hacer tiempo.

Mientras tanto, Rominger había llegado a la gasolinera a las 10:45 y emprendió el descenso a las 10:50. A las 10:55 comienzan un descenso tranquilo los cuatro que formaban el grupo rondando velocidades de entre los 27 y los 35 km./h. A la altura de Algarrobo hacen contacto con Rominger y Chozas que venía subiendo. En este punto se reúnen, charlan un poco, y continúan el descenso.

En la N-340 se establece un ritmo de 29 km./h aprovechando cierto viento extraño a favor. Pero al llegar a Torre del Mar el viento cambia definitivamente para ponerse en contra y se baja el ritmo a no más de 26 km./h aunque más tarde tienen que volver a bajarlo a 23 ya que Rominger había desaparecido. En el Castillo del Marqués se reagrupan y Rominger acusa a los cinco de haberle maurao. No hubo intención. Alguno mas debería haber confesado su maure. Al reanudar la marcha el grupo queda dividido en dos, delante Chozas, Olano y Telecom y detrás Er Dergao, Rominger y Mauri. Los dos grupos llevan una velocidad aproximada de 26 km./h pero separados por unos cientos de metros.

Al llegar al cruce de la autovía, mas conocido como el Sprint de Rominger, todos bajan la velocidad a 21 km./h para recuperar piernas aunque Rominger y Mauri recuperan como para tres piernas. Aun así llegan juntos a la zona de abocatamientos donde se reincorpora Gentile y su director deportivo. Tras tomar unos refrescos se dirigen, cada uno, a sus sedes deportivas a rendir cuentas de los 79 km. a una media superior de 21 km./h. Según todos, esta forma de hacer la salida, fue de lo más satisfactoria.

El próximo domingo toca La Corta, de modo que montad ruedas gordas sobre todo para el descenso.

 

 


Manuel García Casado